Tal y como cita Pere Marqués en
pangea.org (http://peremarques.pangea.org/si.htm)
nos encontramos ante una sociedad cambiante caracterizada por continuos avances
científicos y tecnológicos. Contamos los usuarios con una difusión masiva de
información a través de distintos
medios.
Toda esta información aumenta sin
cesar y se muestra de una forma muy rápida, creciendo a un ritmo incesante.
La dificultad estribará en acertar
con los filtros y la selección adecuada de esta información. El bombardeo
constante de información: correo electrónico, whatsapp, Facebook, twitter,
lectores RSS como Feedly, flipboard, televisión, etc…. provoca que estemos tan
conectados que podemos incluso padecer adicciones.
Es cada vez más frecuente encontrar
jóvenes y no tan jóvenes mirando constantemente el móvil tanto en la calle,
como en recreos, como en transporte público, incluso en celebraciones donde se
llega al extremo de encontrarse juntos en la misma mesa y comunicarse a través
de whatsapp.
Recuerdo no muy lejana aquella época
en la que ibas en el tren o metro y los jóvenes hablaban o leían. Ahora están enganchados
al móvil.
Es tan amplia la distribución de la
información, lo que algunos denominan las “autopistas de la información”, que
puede congestionar el espacio temporal del que se dispone para continuar
aprendiendo o formarse a través de internet. No hablemos ya del ocio y tweets
con los amigos.
Si sumamos ambos aspectos podríamos estar
hablando de cerca de dos/tres horas al
día conectados al móvil o al ordenador
para gestionar toda esta información. Si a esto le sumamos la vida laboral y
familiar de atención a la pareja y a los hijos y las relaciones de amistad hay
días que faltan horas.
Internet nos ofrece herramientas
para gestionar la información. Desde que conocí Twitter y Diigo, antes hacía
servir Delicious, para mí son dos de las herramientas imprescindibles. Ambas las
complemento con Feedly y Flipboard. Actualmente participo en el mooc de
Educalab y estoy conociendo más herramientas que me pueden ayudar a gestionar
la información como: Netvibes o
Symbaloo.
Ramón Archanco cita
en http://papelesdeinteligencia.com/infoxicacion-o-el-problema-del-exceso-de-informacion/
“Este es el verdadero problema de la infoxicación, que cada vez se
agudiza más, dado que cada vez es mas fácil la divulgación de contenidos y la
creación de estos, resulta que cada día es mas difícil mantenerse al día, por
el volumen y la velocidad de circulación de la nueva información.”
También resulta muy
interesante conocer el punto de vista y las opiniones de Javier Velilla en http://www.youtube.com/watch?v=Wj4ojIM6C0c
Infoxicación, cuando la respuesta no es tecnològica, sinó cultural y en http://www.youtube.com/watch?v=hiYdXJmQvsc
Debate sobre la sesión sobre
infoxicación.
El problema radica
en que la infoxicación es un problema que irá a más dado que existe una enorme
facilidad para publicar y crear información. Archanco también nos hace ser
conscientes de lo que él llama el “coste de oportunidad” refiriéndose a aquello
que dejamos de hacer para buscar o leer
información.
Archanco ante toda
esta disjuntiva apuesta porque “Los sistemas y metodologías basadas en la
vigilancia e inteligencia competitiva resuelven el problema de la infoxicacion”.
Este autor apuesta por el uso de marcadores o metabuscadores.
Coincidiendo con el
curso de Educalab el uso de herramientas específicas de gestión, filtrado y
clasificación de la información, si bien no puede resultar la solución
definitiva, sí que puede suponer una gran ayuda para todos aquellos que
pretendemos formarnos y continuar aprendiendo a través de internet.
Ahora estamos en el
camino. Falta descobrir hacia dónde nos llevarà.....
Francisco Martínez